Arriésgate, eso si hazlo cuando estés seguro de que todo va a salir bien. Yo no me he arriesgado, sí soy una cobarde. Mis piernas se paralizaron y mi cerebro trabajó más que nunca y no dejó que el corazón reaccionara. Sí, odio esos momentos en los que no sabes qué hacer y haces lo que va contra ti.
YA VENDRÁN TIEMPOS MEJORES Y CHARLAS QUE LO CUREN TODO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario