Bienvenido. ¡Vive y deja vivir!

domingo, 8 de abril de 2012

Solo pido que no ignores a tu corazón, es el único que siempre tiene la razón.

Ella, la chica que había sido su todo, andaba sola por la calle. Él la vio pasar y se quedó mirándola atónito. Hacía un bueno tiempo que no la veía y aunque había sido culpa suya ese distanciamiento, ahora sentía que la veía otra vez de un modo especial. Se quedó allí sentado viendo como el que había sido el amor de su vida se iba otra vez, como hace un tiempo, que la había dejado marchar.
Había cometido errores en el pasado, sí. El lío que había tenido en la cabeza le había hecho perder algunas de las cosas mas importantes de su vida. Había vivido la vida el límite y disfrutado de su libertad. Pero ahora, después de haberla visto, su cabeza empezó a recapacitar. Una gran cantidad de recuerdos inhundaron su memoria y sintió que la necesitaba. Necesitaba volver a sentirla, volver a tocar sus labios y acariciar su pelo. Deseaba con todas sus ganas volver a mirarla a los ojos, esos ojos llenos de vida, y decirle te quiero, volver a hacerle ver que era "la mejor", pero no sabía cómo. Hacía de eso tanto tiempo que ella ya habría rehecho su vida, tal vez ella no lo quisiera ver.
Sentía miedo, sus malditas manías y su manera de vivir la vida le habían jugado una mala pasada, le habían hecho perderla... a ella, a lo más hermoso que había tenido, a la que de verdad amó y a la que lo hizo sentirse amado y especial. Aquella que le había entregado su corazón junto con su cuerpo, aquel cuerpo que tantas veces lo hizo enloquecer, aquellas curvas que conocía tan a la perfección. Todo eso, lo había perdido. Y ahora se preguntaba el por qué de su idiotez.
Cuando la dejó marchar era consciente de lo que perdía y aún así lo dejó pasar. Ahora sentía un odio hacia si mismo por esta razón.
Nunca la había necesitado, tal vez su cabezonería lo había engañado haciéndole creer que lo que estaba haciendo con su vida era lo correcto, pero ahora era su corazón el que hablaba y con cada uno de sus latidos le decía que era lo que necesitaba. Ella, el gran amor de su vida.



sábado, 7 de abril de 2012

Querido tú,

                                                                                                                        A día de hoy.                                                                                                                      
                                                                                                                        C/ Tu corazón.  
Querido tú,
Aquí estoy yo otra vez, escribiéndote para en realidad no decirte mucho. Tampoco creo que te importe mi situación, pero escribir nunca está demás. Desde hace un tiempo no sé nada de ti, no te has molestado en escribirme. Tú tampoco has tenido noticias mías o eso creo... pero bueno, que más da.
No es la primera carta mía que lees, sin embargo la primera tenía un contenido más especial que esta y te la entregué en la mano. Recuerdo que en ella te contaba una historia. No sé si te acuerdas de su argumento, pero ahora debo decirte que no ha tenido un final feliz. El "vivieron felices y comieron perdices" solo pasa en los cuentos de hadas supongo... y mi historia, aquella que un día de enero te conté, era la mas pura realidad.
¿Qué más puedo contarte? Mmm no sé, sería raro no decir que te echo de menos, sería ilógico no decir que recuerdo la infinidad de momentos, sería mentira decir que me importas una mierda. Pero bueno... que más da, ¿no?
Creo que la vida te está dando cosas que yo no te di, por lo feliz que eres ahora, tal vez ni era ni soy lo mejor para ti. Me alegro, aunque supongo que me molesta no haberte dado la felicidad que tienes ahora.
Por cierto, te mando también una foto al final de esta carta, foto que tal vez te suene de algo, alomejor te recuerda a mi olor y a nuestros momentos juntos, pero que más da.
Dado que las cosas te importan poco, voy a empezar a seguir tu ejemplo, tal vez me vaya bien.
Bueno, ya solo me queda despedirme. Espero que te molestes en leerla hasta el final aunque no espero tu respuesta. Que te vaya bien.


Atentamente,
                                                   -loquesesupongaquesignifiqueparati-