Bienvenido. ¡Vive y deja vivir!

martes, 29 de mayo de 2012

Mi ídolo Romeo luchó por "amor".


Me presento, soy Julieta. Sí, la protagonista de aquella novela en la que supuestamente el amor vencía a todo lo demás. Mi Romeo, amaba como nunca nadie podría amar y daba la vida y el alma a un desengaño. Mas solo era así conmigo, únicamente Julieta tuvo la llave correcta para su corazón y todavía no ha nacido otro alguien que pueda enamorarle como lo hizo ella. Pues, no es lo mismo hacer el sexo, que te hagan el amor.
Nuestra historia, la más bella, por eso es recordada. Pero en realidad no tuvo el final que se le dio. 
Déjame contarte la historia de ese gran amor: Se lo entregué todo, absolutamente todo, e hicimos un pacto de palabra, él me amaba, yo le amaba. Ambos compartimos un corazón y llegamos a ser la droga del otro, pero Romeo se desintoxicó. Un día decidió ir a la Guerra a luchar por otra cosa que no era yo y lo deje ir, alguien que se va así sin más, dejando atrás a lo que se supone que más quiere solo puede estar buscando una cosa, aprender lo que es cometer un error. Romeo solo mira por su bien sin saber que lo mejor está en Julieta. Quien sabe, tal vez lo que busque sea un futuro dolor, esa sonrisa que lleva puesta, tarde o temprano traerá tristeza y el amor de Julieta solo cura una vez. 
No existe un hasta luego en esta historia, tan solo un simple adiós. "Nunca me dejes", pediste. Supongo que al menos Julieta cumplió su promesa.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Déjate llevar por lo que sientes, no por lo que deberías sentir.


En realidad, no sabía sobre que tema hablar y bien, hace un tiempo que me ronda una duda por la cabeza. ¿En qué te has convertido? Esa es mi pregunta. Solía conocerte como nadie, aunque tal vez estuvieras haciendo un papel de esos baratos. No me sorprendería nada, la verdad. Solamente tú, has conseguido traerte de lo alto a lo más bajo sin razón alguna... Supongo que por intentar mostrar algo. Algo que te está haciendo parecer un monito de feria, para ser claros.
Está bien, tienes razón, yo solo soy un espectador más de este circo, pero creo que mi butaca es la más adecuada para verlo todo. Desde aquí veo cómo detrás de escena todos te ríen tus actos. Eres su actuación principal, es lo mínimo que podían hacer. Luego veo cómo sales al centro del escenario contento, intentando convencerte de que lo que estás haciendo es por propia iniciativa, pero yo, que desde aquí lo veo todo, me he dado cuenta de lo que de verdad eres. Pero, ¿qué pretendes con ello? Lo único que recibes, como dice el gran Eminem, son sus falsos: "¡Aaah, Marshall, eres tan gracioso, deberías ser un comediante, demonios!" Pero desgraciadamente lo eres y lo peor de todo, te gusta serlo. Pues bien, sigue así, yo seguiré observando desde aquí cómo pasa lo que tú denominas "vida", hasta que algún día lo que les das no sea suficiente y yo tenga la razón, al fin.