Bienvenido. ¡Vive y deja vivir!

martes, 25 de diciembre de 2012

Mi esencia

Bueno, después de todo lo que ha pasado y de todas las cosas que hemos vivido, que he vivido. Lo más grande es decir que sé que nunca me arrepentiré de nada. Porque mientras duró fue todo verdadero e hice siempre lo que sentía, lo que mi corazón quería y mi mente aprobaba. Me equivoqué, dije cosas sin pensar; pero también amé como nunca lo había hecho. Y quizás esto parezca un poco de arrastre y no, no lo es. Estoy recordando, escribiendo mis memorias de este capítulo. Y a mi siempre me ha encantado recordar, lo bueno y lo malo... Recordarme lo mucho que he vivido ya en estos dieciséis añitos, lo fuerte que he sido y lo fácil que me he adaptado.
Al fin y al cabo, tanto no me quedó por decir como pensaba hace unas semanas. Lo esencial es invisible a los ojos, decía El Principito. Pero mis ojos te lo decían todo. Los conocías, me conocías. Sabes cuál es mi esencia, en lo que creo y dejo de creer... No hace falta que diga nada más. El tiempo nos pondrá a cada uno en su lugar. Y sí, creo en el destino; pero todavía creo más en mi.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Infinito sin serlo.

Tendría que pensarme muchas veces la manera de empezar esta entrada, porque es verdad, en estos momentos hay muchas cosas que decir. Estaría en lo cierto si digo que sé que si pudieras dar marcha atrás al tiempo, cambiarías las cosas, que no te permitirías cometer ese error y que no te habrías marchado.
Es extraño saber que hasta el último momento supiste quién era yo en tu vida y lo que significaba para ti, pero aún así me dejaste ir... Tal vez fue porque sabías que en ese momento ser lo que eramos no era lo mejor y que seguramente volvería a ti y razón tenías, cómo no iba a volver siendo quien eres.
Y es que el orgullo siempre puede con las palabras, pero nunca ha conseguido vencer a una mirada, a una caricia, a esas cosas que dices porque te salen del corazón sin pensarlas, porque si las pensaras nunca las dirías. Este tipo de cosas hablaron por ti, ellas demuestran lo que tú callas ya que saben tan bien como tú que siempre seré tuya y aunque te cueste decirlo, siempre serás mío. La felicidad que nos dábamos el uno al otro es difícil de volver a conseguir y en algún momento lo echaste de menos.
Sin embargo, cada uno tiene su camino, ya nuestro momento pasó y ahora simplemente queda que nuestro corazón lo sepa... que aunque volvamos a enamorarnos, nunca será lo mismo por el simple hecho de no ser tú y yo, pese a que ese tú y yo ya no sea posible más allá de la "amistad" si es que se puede llamar así.          

lunes, 26 de noviembre de 2012

Es un te quise más que un te quiero

Y ahora cuando ya ha pasado todo, es momento de recordar. Recuerdo cuando todo empezó, ese día fue muy especial, más para él que para mí. Su sonrisa tras mis labios lo decía todo. 
Los primeros días fueron perfectos, estábamos completamente cegados por nuestro nuevo amor, recuerdo que en la escuela solía mirarlo, pero no tardaba mucho en salirme la sonrisa al verlo ponerse rojo, sonreír y apartarme la mirada... Él creía estar enamorado, yo no lo creía tanto. Sus promesas se me hacían raras, ya había escuchado esas mismas palabras antes y me habían derrumbado, pero poco a poco, su manera de tratarme me llevo a creer. Su casa se estaba convirtiendo en otro hogar, y lo mismo pasaba con él, ya no hacía falta preguntar si podía venir, tan solo bastaba un "viene". Teníamos planes de futuro, pero eso tampoco hay que tenerlo en cuenta, somos jóvenes, nos es fácil soñar.
A veces no hacía falta besarnos, con simples caricias y miradas ya se mostraba nuestro amor. Pues bien es cierto, todo iba bien... Pero como muchas cosas, llegó a a su fin.
No sé quién está leyendo esto, pero debes estar pensando "lo quiere" y no, siento decir que estás equivocado, es un "lo quise" más bien. Esto son simplemente recuerdos y una manera simple de dejarlos ir a esa parte de la mente en la que, los tenemos presentes simplemente si pensamos en ellos. Es posible que esto que estoy viviendo sea la etapa más feliz de mi vida... El pasado me ha servido para aprender a aceptar las cosas, el amor antes para mí lo era todo, ahora ya solo significa esperar, esperar a que llegue el adecuado. Tal vez tarde un poco, o mucho, quién sabe, alomejor ya ha estado en mi vida, o será una persona inesperada, pero bueno, tampoco hay prisa, cuando tenga que ser, será. Por el momento a disfrutar de cada día como si fuera el último y a aprender que las pequeñas cosas, son las que de verdad valen la pena. 

miércoles, 29 de agosto de 2012

Perfección

No eres perfecto, yo tampoco lo soy y ninguno de los dos será perfecto nunca. Pero me has hecho reír más de una vez, me haces pensar las cosas dos veces y admites ser humano y cometer errores, me aferraré a ti y te daré todo lo que pueda. No me recitarás poesía, no pensarás en mi en todo momento, pero me darás una parte tuya que sabes que puedo romper. No te haré daño, no te cambiaré por nada y no esperaré de ti más de lo que me puedes dar. Sonreiré cuando me hagas feliz, gritaré cuando me vuelvas loca y te echaré de menos cuando no estés junto a mi. Nuestro amor durará si debe haber amor. Porque los hombres perfectos no existen, pero tú eres perfecto para mi. 

domingo, 22 de julio de 2012

Eres tú.

Y es que nunca ha tenido un principio, desde pequeñita ya mi corazón se había fijado en él.
Nunca he podido verlo como alguien más, o lo he querido o no, jamás hubo un punto medio y es ahora que entiendo que mi corazón no ha podido verlo nunca como menos de lo que somos ahora. Intentó que fuera mi amigo, pero sin resultado alguno, será todo por él, porque siempre ha sabido cómo tratarlo, siempre ha formado parte de su cura y siempre, de algún modo, ha estado en él. 
Y es que cada día da nuevas razones para amarle, creía haber conocido lo que era sentirse completamente amada, pero claro, no lo conocía a él.
Mejor sutituyamos "él" por "tú" . Eres más de lo que podría imaginar, más de lo que merezco y más de lo que nunca había visto y veré, contigo lo tengo todo, y ese todo, eres tú.

sábado, 16 de junio de 2012

Scriptamanet

En una pareja... existen rachas.
Existen días buenos y días malos.
Existen días... que todo va mal.. sin saber siquiera porque.
Existen días... que no hablar, es crear tensión.. y si hablas, la creas también.
Existen días... que deseas no haberte levando de la cama para salir con tu pareja.
Existen días... que te puedes llegar a plantear un, que hago yo con alguien así.
Existen días... que piensas donde está la persona que a ti tanto te gusta.
Existen días... muy malos, que puedes pensar que la relación se está apagando.


Pero es solo, cuando llegas a casa, cuando te sientes mal contigo mismo por no haber sido lo mejor que podías, que te das cuenta de que no... que no puedes vivir sin dicha persona, y aunque algunas veces parece que no da una... realmente no es la otra parte, eres tu quien no está centrado donde deberías.

Y bueno, es solo cuando llegas a casa, que te das cuenta de que la amas con locura y no, un mal día se compensa con todos los buenos días que a tu lado he pasado. Pero todo esto no es razón, para no pedir unas disculpas por todos los malos días que te he echo pasar.



Anónimo.

Nunca digas siempre.


Si no me amas
cual es el sentido de ocupar
la misma casa, el mismo aire.

Siendo Sincero
la magia que por mucho nos unió
se fue de largo, se nos perdió.

De nada sirve un beso sin amor
cuando hay dos almas destenpladas
bajo la almohada se agasapa la pasión,
desafina...

Lo mas sensato es darle al corazón
su libertad que estuvo esclavizada
por aferrarnos a vivir en el error

Ya lo ves.
De que me sirve tanto para que..
Si no me amas

martes, 29 de mayo de 2012

Mi ídolo Romeo luchó por "amor".


Me presento, soy Julieta. Sí, la protagonista de aquella novela en la que supuestamente el amor vencía a todo lo demás. Mi Romeo, amaba como nunca nadie podría amar y daba la vida y el alma a un desengaño. Mas solo era así conmigo, únicamente Julieta tuvo la llave correcta para su corazón y todavía no ha nacido otro alguien que pueda enamorarle como lo hizo ella. Pues, no es lo mismo hacer el sexo, que te hagan el amor.
Nuestra historia, la más bella, por eso es recordada. Pero en realidad no tuvo el final que se le dio. 
Déjame contarte la historia de ese gran amor: Se lo entregué todo, absolutamente todo, e hicimos un pacto de palabra, él me amaba, yo le amaba. Ambos compartimos un corazón y llegamos a ser la droga del otro, pero Romeo se desintoxicó. Un día decidió ir a la Guerra a luchar por otra cosa que no era yo y lo deje ir, alguien que se va así sin más, dejando atrás a lo que se supone que más quiere solo puede estar buscando una cosa, aprender lo que es cometer un error. Romeo solo mira por su bien sin saber que lo mejor está en Julieta. Quien sabe, tal vez lo que busque sea un futuro dolor, esa sonrisa que lleva puesta, tarde o temprano traerá tristeza y el amor de Julieta solo cura una vez. 
No existe un hasta luego en esta historia, tan solo un simple adiós. "Nunca me dejes", pediste. Supongo que al menos Julieta cumplió su promesa.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Déjate llevar por lo que sientes, no por lo que deberías sentir.


En realidad, no sabía sobre que tema hablar y bien, hace un tiempo que me ronda una duda por la cabeza. ¿En qué te has convertido? Esa es mi pregunta. Solía conocerte como nadie, aunque tal vez estuvieras haciendo un papel de esos baratos. No me sorprendería nada, la verdad. Solamente tú, has conseguido traerte de lo alto a lo más bajo sin razón alguna... Supongo que por intentar mostrar algo. Algo que te está haciendo parecer un monito de feria, para ser claros.
Está bien, tienes razón, yo solo soy un espectador más de este circo, pero creo que mi butaca es la más adecuada para verlo todo. Desde aquí veo cómo detrás de escena todos te ríen tus actos. Eres su actuación principal, es lo mínimo que podían hacer. Luego veo cómo sales al centro del escenario contento, intentando convencerte de que lo que estás haciendo es por propia iniciativa, pero yo, que desde aquí lo veo todo, me he dado cuenta de lo que de verdad eres. Pero, ¿qué pretendes con ello? Lo único que recibes, como dice el gran Eminem, son sus falsos: "¡Aaah, Marshall, eres tan gracioso, deberías ser un comediante, demonios!" Pero desgraciadamente lo eres y lo peor de todo, te gusta serlo. Pues bien, sigue así, yo seguiré observando desde aquí cómo pasa lo que tú denominas "vida", hasta que algún día lo que les das no sea suficiente y yo tenga la razón, al fin.


domingo, 8 de abril de 2012

Solo pido que no ignores a tu corazón, es el único que siempre tiene la razón.

Ella, la chica que había sido su todo, andaba sola por la calle. Él la vio pasar y se quedó mirándola atónito. Hacía un bueno tiempo que no la veía y aunque había sido culpa suya ese distanciamiento, ahora sentía que la veía otra vez de un modo especial. Se quedó allí sentado viendo como el que había sido el amor de su vida se iba otra vez, como hace un tiempo, que la había dejado marchar.
Había cometido errores en el pasado, sí. El lío que había tenido en la cabeza le había hecho perder algunas de las cosas mas importantes de su vida. Había vivido la vida el límite y disfrutado de su libertad. Pero ahora, después de haberla visto, su cabeza empezó a recapacitar. Una gran cantidad de recuerdos inhundaron su memoria y sintió que la necesitaba. Necesitaba volver a sentirla, volver a tocar sus labios y acariciar su pelo. Deseaba con todas sus ganas volver a mirarla a los ojos, esos ojos llenos de vida, y decirle te quiero, volver a hacerle ver que era "la mejor", pero no sabía cómo. Hacía de eso tanto tiempo que ella ya habría rehecho su vida, tal vez ella no lo quisiera ver.
Sentía miedo, sus malditas manías y su manera de vivir la vida le habían jugado una mala pasada, le habían hecho perderla... a ella, a lo más hermoso que había tenido, a la que de verdad amó y a la que lo hizo sentirse amado y especial. Aquella que le había entregado su corazón junto con su cuerpo, aquel cuerpo que tantas veces lo hizo enloquecer, aquellas curvas que conocía tan a la perfección. Todo eso, lo había perdido. Y ahora se preguntaba el por qué de su idiotez.
Cuando la dejó marchar era consciente de lo que perdía y aún así lo dejó pasar. Ahora sentía un odio hacia si mismo por esta razón.
Nunca la había necesitado, tal vez su cabezonería lo había engañado haciéndole creer que lo que estaba haciendo con su vida era lo correcto, pero ahora era su corazón el que hablaba y con cada uno de sus latidos le decía que era lo que necesitaba. Ella, el gran amor de su vida.